Ya que finalmente parece que la primavera y un tibio sol se abren paso, y que los fines de semana hay que masticarlos como se merecen, comenzamos unos post sobre armonías y maridajes que van de cine con carne a la parrilla. Para esta primera entrada (habrá más), recomendamos un repóquer de cervezas artesanas con el nivel de ácido algo subido (cual vino natural) o con dulzor y limpieza para que pueden ser un divertido oponente, un contrincante a la altura del vacuno mayor. Ahora ya sabemos qué son los IBUs (siglas de International Bittering Unit, unidades que determinan el amargor de cada artesana) y con qué marida cada una. El boom de los cerveceros artesanales no cesa. Una profesión de nuevo cuño que no para de otorgar buenas referencias. Así que les dejamos cuatro birras que echar al fuego…
CCVK RED ALE (Vallecas, Madrid). VALLEKAS AL PODER
La primera es una birra urbana a más no poder, que se elabora bajo el madrileño Puente de Vallecas. Anecdotario: los abuelos de los fundadores de la firma tenían una fábrica de lejías y hoy sus nietos hacen una cerveza con mucha aceptación entre los entendidos. CCVK (siglas que esconden Compañía de Cervezas Valle del Khas, microcervecería de culto) es una red ale color ámbar oscuro, una tostada maltosa que va estupendamente bien con parrillas de carne, especialmente buey de corte, digamos, más dulzón. Despliega ecos a corteza de pan y toques herbáceos y florales provenientes de los lúpulos.En nariz da notas anaranjadas y de fruta de hueso. Su espuma es beige, tiene largura en boca gracias sus sabores a caramelo y a cereales malteados. Su fermentación es alta, o sea, ale. Colofón acaramelado y dulce. No olvide tomarla bien fría, a unos cuatro grados… y con gente de confianza. Su precio, entre 4 y 5 euros.
http://ccvk.beer/
AYINGER CELEBRATOR DOPPLEBOCK (Aying, Baviera, Alemania). SUBLIME BÁVARA
De Vallecas a Alemania, otra malteada de postín. La hacían los monjes hace siglos (grandes devoradores de carne porcina) y la receta conserva la negrura de caoba en el color con toques bermejos. Estupenda espuma amarronada y gran fragancia. Sabores achocalatados, a café y torrefactos, con una integración perfecta del ahumado. En boca ofrece recuerdos de ciruelas pasas, toffee, hasta regaliz. Resulta potente y equilibrada, idónea para armonizar con txuletones y amigos que no paran de reírse y charlar alrededor del fuego. Esta doble bock (una lager fuerte) resulta realmente densa y subida de grado alcohólico, con fuerte retronasal. Se elabora en Aying, Baviera, y tiene unas puntuaciones en certámenes alrededor del mundo que están plenamente justificadas. Se puede servir a unos 9 grados.
http://www.ayinger-bier.de/
RODENBACH VINTAGE (Roeslare, Flandes, Bélgica). UNA RAREZA MARAVILLOSA
No podían faltar Flandes en este triunvirato. La Rodenbach Vintage es una roja de Flandes que brota como un gran vino de crianza, edición limitada que envejece durante dos años en barricas de roble. El barril, tras dos años de maduración, ha producido la mejor cerveza. Vendría a ser un grand cru en modo birra, y no la saque mucho ante los colegas trasegadores de rarezas porque su precio es de unos 10 euros y se suele agotar on line fulgurantemente. Una joyita esta roja flamenca sour ale que ofrece 8 grados. Su acidez va de perlas para los asados potentes y de largura en boca. Su sabor es complejo, redondo, intenso y refrescante. El gusto afrutado de la manzana se combina la microflora de la madera, o sea, toques a vainilla, cereza y regaliz. Notas de manzanas verdes mezcladas con miel y chocolate. El retrogusto agrio, afrutado y suave es largo y bien equilibrado como un gran vino de crianza. Resérvela para ese T-Bone de buey, para esa fecha especial, para esa compañía que lo merece, para ese tomahawk tan apetitoso.
18,41 DAWAT (Cuenca). SUBIDITA DE TONO…
Agua de Cuenca, nada de aditivos, ni conservantes… y un 18,41% de volumen alcohólico, así que la Dawat es la más potente del país, para que cuando la abras le cuentes el dato a tus colegas. En boca hay pasas, almíbar, licor y orejones. Se congela el mosto de la cerveza (y se va despojando del hielo que se va formando), lo que hace que se la denomine una eisbock (de hielo). Muy licorosa, pero sigue siendo cerveza, ojo, realmente golosa con sus toques de repostería, caramelo y toffee. Color ámbar cobrizo, tiene cuerpo medio-alto. En nariz da aromas de notas almibaradas, malta y brioche. En boca también tiene ligero sabor a frutos secos y notas de licor. Se precia de ser la birra española de más alta graduación precisamente debido a la mencionada elaboración al congelar el mosto… En el combate con la carne, ambos rivales salen muy bien parados. Una seria aliada esta Dawat que se tarifa por encima de los nueve euros.
BIDASOA BASQUE BREWERY (Irún, Gipuzcoa). LA VASCA “PELIGROSA”
Color negro oscuro y aromas y sabores intensos a chocolate y café complementados por matices dulces de maltas caramelo para una stout que ensambla perfecta. La vasca de este quinteto asoma con ligero amargor final alimonado y ácido. Un proyecto muy personal del microbiólogo Carlos Arrecubieta, que tras pasar una estancia laboral en Nueva York y mamar del aprendizaje de un maestro cervecero volvió a su tierra para fundar esta brewery en 2014. Elaboran 24.000 litros al año y se han hecho un hueco en este exigente mundo de las artesanales. Dicen de ella que se trata de una imperial Stout equilibrada, “agradable y peligrosa, pues su 10,5% de alcohol no se nota por ningún lado”.
www.bidassoa.es